A finales de noviembre, comenzamos en Quellaveco las pruebas del espesador de relaves de 120 metros de diámetro, uno de los más grandes del mundo. Es uno de los principales logros en nuestro camino para comenzar operaciones como una mina sostenible.
El espesador de relaves es un equipo que separa sólidos de líquidos en suspensión y maximiza la reutilización del agua en la planta concentradora. También se usa en minería para extraer fragmentos de carbón con un tamaño menor de 10 milímetros.
Gracias a este equipo, Quellaveco recuperará el agua de los relaves y podrá volver a usarla en el procesamiento del mineral en la planta de Papujune. De esa manera, se logrará un proceso sustentable y que sea responsable con el recurso hídrico.